domingo, 22 de diciembre de 2013

¿Navidad o exceso de consumo?

*Dejar de comprar, comprar y comprar tantas cosas inútiles solo por gastar lo poco que nos sobra.
*Dejar de pensar tanto en el YO y vernos como la totalidad que realmente somos y la Unicidad a la que estamos inevitablemente adheridos.
*Compartir con quien no tiene nada o tiene un poco menos que nosotros.
*Tener un poco más de coherencia entre lo que decimos y lo que hacemos... por lo menos una vez al año.
*Dejar de lado tantas tradiciones (aunque se parecen más a imposiciones) sin sentido (por no decir estúpidas).
*Celebrar en paz y sin lastimar a nadie... ni a nada.
*Pasar más tiempo con aquellos a quienes de verdad le importamos...
Creo que todo eso le daría más sentido al mensaje de quien dicen que nació por estos días hace aproximadamente 2 mil años.
No se... digo yo!
Elvis Canino

viernes, 20 de diciembre de 2013

Crianza autoritaria - Crianza respetuosa


Yo tengo cuatro hijos ,mi hijo mayor tiene 16 años, yo nunca habia escuchado de la crianza con apego ,he hice lo que la gente me aconsejaba, puse de lado mi corazon y mi instinto de madre para dar oidos a las palabras de la gente que segun ellos saben educar hijos,golpee a mis niños por que asi entendian y lo unico que conseguia era que me tuvieran terror, en una ocasion levante del cabello a mi hijo el mayor por que hizo un berrinche y asi segui criandolo ,llego mi otro hijo y la misma escuela, aun que nunca los deje llorar inesesariamente, los traia cargados todo el dia y toda la noche si era necesario, pero los berrinches temidos eran otra cosa, era pura violencia de mi parte,mis hijos me tenian terror ,todavia recuerdo su terror y como se escondian cuando yo llegaba, todo eso bajo la mirada aprobatoria de mi suegra por que yo vivia en su casa y asi se tenian que educar,no saben el dolor y el arrepentimiento que esto me causa ,no saben como quisiera regresar el tiempo y poder cambiar las cosas, despues llego mi tercer bebe y ahi empece a escuchar a mi corazon y las cosas empezaron a cambiar y conoci este metodo de crianza y fue una bendicion pero tambien una tortura ,por que me siento un ser vil por haber hecho lo que hice con mis otros hijos, por ultimo llego mi Princesa ya que es la unica niña encasa y pues al 100 en la crianza con apego ,no hay golpe inofensivo, mi hijo el mayor se acuerda de una cintarisa que le puse y yo no me acuerdo de verdad, ahora estoy educando a dos adolecentes con respeto y apego, me ha costado mucho trabajo y mucho perdonarme a mi misma por lo que hice,no golpeen a sus hijos ,ni siquiera suavemente eso no sirve para educar ,solo para meter miedo, la paciencia es la mejor manera de educar, los niños no se echan a perder eso es mentira ,saben? Borrar 10 años de maltratos no es facil, pero vale la pena el esfuerzo mis adolecentes son otros han cambiado mucho, y yo tambien ahora cuando los voy a llamar la atencion si estoy enojada no hablo y me espero para no decir algo que lo vaya a lastimar, darles a mis hijos respeto a sus sentimientos y su manera de pensar diferente a la mia es lo mejor que he hecho, tengo dos adolecentes y dos pequeños que aun que hay ocasiones que mi casa parece manicomio se respira tranquilidad y armonia, me averguenza mucho lo que hice pero me llena de orgullo lo que estoy haciendo, aprendi a cayar a la gente que merece ser cayada e ignorada, aprendi a escuchar a mis hijos no a los demas ,el amor ,la comprension y la paciencia hace de nuestros hijos niños amorosos ,comprensivos y pacientes.
Magy, mamá de 4 hijos.

jueves, 19 de diciembre de 2013

Ustedes tuvieron Suerte.

Eso dicen ahora muchas personas, más de las quen pueda contar con los dedos de mis manos, 6 años después que muchos de ellos pasaron el primer año vaticinando lo malcriada que iba a ser Eva por llevarla conmigo,(por cierto les cuento que la "malcriadez" se hereda, jaja)  darle teta, dormir con ella, respetar sus tiempos y necesidades, esperar que madurara su ritmo de sueño, pasar casi 3 años sin dormir más de dos horas seguidas y luego otra año atosigando para que la pusiéramos en guardería a "socializar", otra año pidiendo que se le quitara el pañal y el actual tema es el "cole", porque allí hay profesionales que pueden enseñarle en 4 paredes más de lo que puede aprender en libertad una niña que a los 5 años ya estaba leyendo, escribiendo, razonando, dibujando hermoso y en continuo aprendizaje . Buscar maneras, literatura, personas que me ayudaran a mejorar mi visión de la vida, averiguar, investigar, leer para conseguir las maneras de criar y educar sin violencia. Cuidar la alimentación de ella, de nuevo leyendo, asesorándome para conseguir un balance en sus comidas, llegando incluso a enemistarse conmigo personas que aún sin hacerlo por mal yo les decía que no llenaran el estómago de Eva de dulces, azúcar, comida chatarra, muchas veces no lo pedí de la mejor manera, pero vaya que soy humana y CANSA pedir lo mismo una y otra y otra vez para que siguieran dando a la niña hasta café, refrescos y dulces a mis espaldas. 6 años educando sin castigos, sin gritos ni chantajes sacando paciencia de donde NO la tengo, leyendo, preparándome, eso si todo con mucho amor y dedicación, buscando siempre el lado positivo en medio de los problemas y luchas del día, en medio de quienes han decidido alejarse de nosotros por no dejarlos inmiscuirse en nuestra familia (tan fácil que es tener hijos y educarles según el precepto de cada quien, no? o quienes ya criaron darle un espacio a quienes empiezan esta tarea, ayudando si, juzgando y criticando no) sintiéndome culpable conmigo misma por muchos años por dejar atrás mi exitosa carrera en el mundo externo y "maravillosa gente" (activar modo irónico)  recordándome lo "perdido" cada vez que tenían oportunidad. Sólo mi Tribu virtual y mi esposo Elvis me daban ánimos, pocas personas valoraban de verdad mi trabajo de educar y criar, esas mismas personas a quienes siempre he escrito en privado pidiendo palabras, asesoría y nunca han dejado de responderme sin juzgar ni criticar, apoyandome y dando asidero en medio de los problemas, en medio de la tragedia del accidente vial cuando nuestra niña cambió su manera de ser y pensábamos que la niña alegre, traviesa, inquieta, cariñosa y habladora no volvería  a nuestras vidas, se había convertido en una niña gris, triste, enojada y de nuevo esos ángeles del ciber mundo estaban allí para ayudarme, darme palabras, ánimos, amor y amistad. He tenido Suerte? Puede ser, pero la suerte de contar con literatura, un maravilloso ciber mundo y contadas pero muy contadas personas en el entorno que han sido respetuosas conmigo en mi manera de educar y criar. Muchas veces hasta pidiendo ayuda en medio de la desesperación llegué a recibir juicios que para nada me ayudaban, "familiares" me han gritado, insultado, vejado por mi manera de educar. Han pasado 6 años, 6 años de criar y educar una niña que vino a poner mi mundo de cabeza, para bien, para juntas dar al mundo algo de lo poco que hemos aprendido, no veo como suerte que sea una niña sana, empática, alegre, feliz, sincera en sus afectos, inteligente, ávida lectora,  creativa y dadora de amor a quien lo merece (y ella intuye quien lo merece), no ha sido suerte, ha sido el esfuerzo en conjunto, ha sido el transitar juntos como familia las buenas, las malas, las rabietas, sus disgustos, mis disgustos, los problemas cotidianos, los juicios del entorno,  la tragedia del accidente, el día a día, sorteando siempre de la mano del amor todas y cada una de las vicisitudes que se nos han presentado, porque nadie está mirando como es nuestra vida y como decía mi abuelita: nadie sabe lo que pesa la carga sino el burrito que la lleva ;) 
Hay varios secretos para criar y educar niños libres y sanos:
La paciencia, el ejemplo, alimentarles sanamente respetando sus ritmos, no dejar que el entorno nos obligue hacer lo contrario a aquello que dicta nuestro instinto y corazón y uno muy importante, intentar mejorar como personas, de nada sirve educar con amor a nuestros niños si nuestro ejemplo es otro (mirar dentro de uno puede ser muy muy doloroso y difícil)
 Janeth Ivimas.

jueves, 5 de diciembre de 2013

Nueva mirada sobre la Navidad


Un recién nacido entre un asno y un buey: muchos comparten hoy esta imagen simplificada de la Navidad. Mi propia imagen de la Navidad está inspirada en lo que aprendí de las mujeres que traían a su bebé al mundo en la más completa intimidad, sin sentirse guiadas u observadas. Está también influenciada por el Evangilium Jacobi Minoris, es decir, el protoevangelio de Jacques le Mineur. Este Evangelio fue salvado del olvido, a mediados del Siglo XIX, por el místico austríaco Jacob Lorber, autor de La Infancia de Jesús. Según estos textos, José partió a la búsqueda de una partera. Cuando regresó, Jesús ya había nacido. Cuando la deslumbrante luz se atenuó, la partera se encontró ante una escena increíble; ¡Jesús ya había encontrado el pecho de su madre! La comadrona exclamó entonces: “¿Quién ha visto jamás a un niño que apenas nacido tome el pecho de su madre?” Es el signo evidente de que este niño, al convertirse en hombre, un día juzgaría según el Amor y no según la Ley.

El día que Jesús estuvo listo para su llegada al Mundo, María recibió un mensaje de humildad. Se encontraba en un establo, entre otros mamíferos. Sin decir palabra alguna, sus compañeros le ayudaron a comprender que en esa circunstancia debería aceptar su condición de mamífero. Debería sobrellevar su handicap de ser humano y quitarse de encima la efervescencia de su intelecto. Debería segregar las mismas hormonas que los otros mamíferos cuando dan a luz a sus bebés, haciendo actuar la parte primitiva del cerebro que todos tenemos en común. La situación era ideal para que María se sintiera segura.

El “trabajo” pudo establecerse en las mejores condiciones posibles. Habiendo percibido el mensaje de humildad y aceptado su condición de mamífero, María se reencontró en cuatro patas. En tal postura, y en la oscuridad de la noche, ella se desconectó fácilmente del mundo. Poco después de su nacimiento, Jesús se encontró en los brazos de una madre extática, tan instintiva como puede serlo una madre mamífera que viene de parir.

En una atmósfera verdaderamente sagrada, Jesús fue recibido y pudo, fácil y progresivamente, eliminar las hormonas del stress que necesitó segregar para nacer. El cuerpo de María estaba muy caliente. El establo mismo estaba cálido gracias a la presencia de otros mamíferos.

Instintivamente, María cubrió el cuerpo de su bebé con una ropa que tenía cerca de su mano. Estaba fascinada por los ojos de su bebé y nada hubiera podido distraerla del intenso intercambio de miradas que se establecía. Ese intercambio de miradas le permitió alcanzar otro pico de Oxitocina, lo cual provocó una nueva serie de contracciones uterinas que enviaron hacia el bebé un poco de la sangre preciosa acumulada en la placenta. Pronto la placenta fue liberada.

Madre e hijo se sentían seguros. Al principio, María, guiada por la parte del cerebro que compartimos con todos los mamíferos, estaba de rodillas. Luego de la liberación de la placenta, se puso de costado, con el bebé cerca de su corazón. En seguida, Jesús comenzó a mover la cabeza, a veces hacia la derecha, otras a la izquierda y, finalmente, a abrir la boca en forma de O. Guiado por su sentido del olfato, se acercaba cada vez más al pezón. María, que aún se encontraba dentro de un equilibrio hormonal particular, y por ello muy instintiva, sabía perfectamente cómo sostener a su bebé e hizo los movimientos necesarios para ayudarlo a encontrar el pecho.

Fue así como Jesús y maría transgredieron las reglas establecidas por los neocórtex de la comunidad humana. Jesús -un rebelde pacífico desafiando toda convención- había sido iniciado por su madre. Jesús mamó victoriosamente durante un largo rato. Con el sostén de su madre, salió victorioso de uno de los episodios más críticos de su vida. En breves instantes se había adaptado a la atmosfera y había comenzado a utilizar sus pulmones, se adaptó a las fuerzas de la gravedad y a las diferencias de temperatura y entró en el mundo de los microbios. ¡Jesús es un Héroe!

No había reloj en el establo. María no necesitaba saber cuánto tiempo Jesús había tomado su pecho antes de dormirse. La noche siguiente, María durmió un sueño ligero. Estaba vigilante, protectora y preocupada de satisfacer las necesidades de la más preciosa de las criaturas terrestres.

Los días siguientes, María aprendió a sentir cuándo su bebé tenía necesidad de ser mecido. Había tal acuerdo entre ellos, que ella sabía perfectamente adaptar el ritmo del balanceo a la demanda del bebé. Siempre meciéndolo, María se puso a canturrear unas melodías a las que agregó algunas palabras. Como millones de otras madres antes que ella, María descubrió así las canciones de cuna.

Jesús comenzó a aprender lo que es el movimiento y el espacio. Aprendió también lo que es el ritmo y, entonces, comenzó a adquirir la noción del tiempo. Entró progresivamente en la realidad espacio-temporal. Luego María introdujo cada vez más palabras al tararear de sus canciones de cuna. 
Entonces Jesús absorbió su lengua materna...


(Michel Odent - Cirujano, Médico Obstetra, Partero)